Ventajas de los liners de silicona de suspensión mediante vacío para el miembro inferior
PRIM Establecimientos Ortopédicos dispone de un amplio catálogo de liners de silicona para complementar el uso de prótesis del miembro inferior, que funcionan como sistemas de suspensión y protección del muñón mediante vacío y que comportan grandes ventajas.
Las prótesis del miembro inferior por amputación han alcanzado una enorme sofisticación y, con el encaje adecuado, pueden proporcionar a la persona usuaria una movilidad completa. Sin embargo, lograr un encaje óptimo es fundamental para garantizar esa libertad de movimientos, pero también para evitar rozaduras y molestias.
Teniendo en cuenta que su llegada al mercado ortésico marcó un antes y un después, hemos charlado con Alejandro Babín, jefe de área de la Zona Centro de PRIM Establecimientos Ortopédicos, para saber más sobre este tipo de liners de silicona.
El sistema de suspensión de vacío de los liners de silicona de Össur ha sido pionero en su especie. ¿Nos podrías explicar por qué?
La empresa islandesa Össur fue la primera en desarrollar un sistema de suspensión mediante membrana hipobárica, patentada bajo las siglas HSM. El liner de silicona se coloca bien ajustado entre la prótesis y el miembro inferior amputado y se genera un vacío entre el sistema rígido de la prótesis y el muñón del paciente, que queda suspendido.
Este sistema tan novedoso, que se comercializa como Seal-In®, ofrece importantes ventajas. La primera y más importante es que supone una alternativa a los sistemas previos. Por una parte, la suspensión mediante pin y el sistema de bloqueo, un tornillo que se coloca en la parte distal del liner y que se engancha en una lanzadera, que tiene un problema fundamental: debido a la elasticidad de la silicona, el liner se elonga a cada paso que da el paciente por el propio peso de la prótesis, provocando lo que se llama efecto de pistoneo. El sistema de vacío mediante membrana hipobárica disminuye drásticamente este efecto, ya que, al estar la prótesis sujeta en estrecho contacto con la musculatura del muñón, el encaje rígido apenas de desplaza.
Otra gran ventaja de los sistemas de vacío es que, al conseguir ese contacto estrecho entre el muñón y el encaje rígido, proporcionan una mejor propiocepción de la prótesis en general, ya que el paciente experimenta una mayor sensación de control.
¿Tienen alguna desventaja estos sistemas?
Efectivamente, como todo en la vida, también tienen algún inconveniente, fundamentalmente la colocación del liner. Para que el sistema funcione, la colocación debe hacerse de forma muy precisa: al introducirlo en el encaje, es imprescindible vigilar que la posición de la membrana hipobárica sea la correcta, ya que, de lo contrario, el aire se filtra y no se logra una correcta suspensión.
¿Existen liners con sistemas de suspensión en vacío distintos al patentado por Össur?
Lo cierto es que existen numerosos tipos de sistemas de suspensión y cada uno tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Los profesionales de PRIM Establecimientos Ortopédicos, como técnicos ortoprotésicos, debemos asegurarnos de escoger la opción que mejor se adecúa a las necesidades y características del paciente entre todas las disponibles. Nuestra experiencia y la formación continua que nos proporcionan las compañías nos sirve de gran ayuda a la hora de decidirnos por unas soluciones u otras.
¿Podrías destacar algún otro sistema?
Probablemente, el más conocido es el Seal-In® de Össur, pero existen otros como es el sistema Pro-Seal de Ottobock, u otros liners con membrana que funcionan por vacío pasivo. Sin embargo, los sistemas más avanzados son los que funcionan por vacío activo, como el sistema Harmony P4 de Ottobock.
Este sistema es una bomba de vacío que retira de forma activa el aire que queda entre el muñón del paciente y el encaje rígido de la prótesis. El propio sistema controla el vacío para que se mantenga en unos niveles de presión negativa concretos, evitando así que se puedan generar problemas adicionales y asegurando una suspensión correcta de la prótesis en todo momento.
¿Qué durabilidad aproximada tienen los liners?
Esta es una pregunta compleja, ya que se consideran materiales fungibles en la fabricación de las prótesis.
Al estar fabricados en materiales como la silicona, el gel de silicona, el uretano o el poliuretano, sufren un enorme desgaste en el uso diario, ya que soportan todas las fuerzas de cizalla e impacto que se generan entre el muñón del paciente y el encaje rígido de la prótesis.
La realidad es que depende enormemente del tipo de actividad diaria que el paciente realice con su prótesis, del nivel de impacto al que la someta, el tipo de liner y el material en el que esté fabricado. En todo caso, su duración media oscila entre los seis y los nueve meses.
Parece imposible imaginar que se pueda utilizar una prótesis de miembro inferior sin uno de estos liners, pero, al ser productos que no llevan demasiado tiempo en el mercado, ¿llegan a todo tipo de pacientes?
Este tipo de sistemas de suspensión de la prótesis mediante vacío están cada vez más extendidos entre los técnicos ortoprotésicos y, desde luego, lo están en PRIM Establecimientos Ortopédicos, ya que sus ventajas superan claramente sus inconvenientes. Además, nuestros pacientes cuentan cada vez con una mayor información propia acerca de las posibilidades que existen en el mercado.
Además, buena parte de nuestros pacientes son usuarios de prótesis desde hace muchos años y conocen perfectamente qué sistema es el que mejor se ajusta a sus gustos y necesidades, por lo que nos lo ponen fácil.
Los sistemas de vacío pueden aplicarse a perfiles de usuarios muy distintos, desde pacientes con altas demandas por su nivel de actividad y de impacto a pacientes geriátricos, que también los encuentran cómodos, siempre y cuando se les explique detenidamente su funcionamiento y se les entrene adecuadamente en la colocación y retirada de la prótesis.
Asesorar de forma clara y concisa al usuario de prótesis sobre las posibilidades de las que dispone, sus pros y sus contras, es una de las funciones del técnico ortoprotésico. Ofrecer al paciente un buen entrenamiento y un conocimiento profundo de la prótesis es una de las tareas a la que más cariño y tiempo dedicamos, ya que es vital para el éxito de la protetización.