La movilidad articular es una de las características del ser humano que más nos caracterizan. Gracias a la libertad de movimientos que nos proporciona nuestro sistema músculo esquelético, podemos hacer desde las tareas más sencillas como la higiene y la alimentación, hasta las más complejas como construir un mueble o escalar una montaña.
¿Por qué debes entrenar la movilidad articular?
La movilidad de nuestro cuerpo es otra de las partes de nuestra anatomía que debemos cuidar para evitar un desgaste excesivo con el tiempo. Según nos hacemos mayores, la edad se va notando por la pérdida de potencia muscular y la mayor dificultad de movimientos, ocasionado en gran medida por la reducción de la elasticidad de aquellos tejidos que sirven para mantener el sistema articular con una correcta funcionalidad, nuestros ligamentos y tendones.
Un tendón, es un tejido conjuntivo que aparece en los extremos distales de los músculos para realizar la inserción (fijación) en el hueso, mientras que los ligamentos, también son bandas de tejido conjuntivo pero con una composición ligeramente diferente que sirve para conectar huesos con otros huesos.
Se calcula que a partir de los 30 años, la elasticidad de este tipo de tejidos que rodean las articulaciones entre las vértebras de nuestra columna vertebral, ha perdido un 30% de la elasticidad que tenía cuando éramos niños.
Pero tenemos un truco para evitar que esto nos ocurra: el ejercicio. Si nos acostumbramos a ejercitar todas estas estructuras anatómicas lo antes posible, podemos conseguir muy buenos resultados, posponiendo los efectos de la edad y ganando vitalidad y flexibilidad en nuestro día a día.
Entrenamientos a todas las edades
Aunque acabamos de hablar acerca de entrenar la movilidad de nuestro cuerpo para evitar dolores una vez seamos mayores, también es un aspecto importante que debemos tener en cuenta cuando hacemos ejercicio siendo jóvenes.
Si vamos al gimnasio, una de las primeras cosas que haremos será estirar, para que el cuerpo no pase de estar en estado de reposo a un estado activo de una manera brusca. Hay que prepararle para el ejercicio físico que vamos a hacer. Los ejercicios de movilidad articular pueden clasificarse dentro de los ejercicios de calentamiento de la actividad física.
Estos ejercicios de calentamiento son obligatorios si queremos evitar lesiones, ya que tras el ejercicio físico nuestro cuerpo libera ácido láctico que se cristaliza en los músculos, creando las conocidas agujetas. Este calentamiento es la mejor manera para evitarlas, a la vez que prevenimos otro tipo de lesiones relacionadas con el ejercicio.
El ejercicio es beneficioso para personas de todas las edades. Se recomienda que a partir de los 65 años de edad se realicen entre 2 y 3 horas de ejercicio moderado, que puede traducirse en paseos y otros ejercicios sencillos, que no carguen demasiado nuestro cuerpo.
Si hemos sufrido cualquier tipo de lesión por realizar mal o no realizar estos ejercicios, recomendamos poner nuestro foco en su recuperación cuanto antes. Podremos necesitar tobilleras, rodilleras o muñequeras, por ejemplo, según la clase de lesión que tengamos. En Prim Establecimientos Ortopédicos podrás encontrar todos los productos que necesitas para tu recuperación, ven a vernos a cualquiera de nuestras seis clínicas físicas y te ayudaremos a elegir la que mejor se adapta a ti.
En posts anteriores os hemos hablado de Los beneficios de la movilidad articular y de diferentes tipos de ejercicios para Entrenar tu movilidad articular.